La corrida que estrenaba la Feria de Otoño de Madrid ha sido aplazada al 8 de octubre por el mal estado del ruedo debido a las fuertes lluvias caídas. Como una playa estaba el redondel venteño, ya sin la antigua pendiente desde que Morante pidiera alisarlo. La cuadrilla de operarios no daba abasto para arreglarlo con los rastrillos, ayudados de un tractor con pala y un dumper. Había zonas que eran un completo lodazal, con el peligro que ello implica.
Mientras se retiraba la lona sobre las cinco y media, el aspecto no era nada halagüeño. Hora y media después (sobre las siete menos diez) se anunciaba la decisión, la más lógica, aunque algo tardía, lo que impacientó y mosqueó a los tendidos (con un gran ambiente), que lanzaron sus almohadillas a la arena.
Minutos antes, matadores (Diego Urdiales, José María Manzanares y Paco Ureña) y cuadrillas pisaban el escenario para comprobar su estado. Uno patinaba, otro se llenaba de barro hasta los tobillos. Seguir adelante hubiera sido atropellar la razón. Y así se decidió aplazar al citado día, que coincide con el tercer 'pack' otoñal (el de la Hispanidad).
La terna lidiará los toros de Victoriano del Río y Jandilla, aunque tres de los que aguardaban este viernes en chiqueros no podrán demostrar ya su bravura en la catedral. Dos de Victoriano y uno de Vegahermosa cumplían seis años en octubre…
Según anunció la empresa por megafonía, las entradas adquiridas para este festejo continuarán siendo válidas para la nueva fecha. Este sábado continúa la feria con una novillada de Fuente Ymbro para Manuel Diosleguarde, Isaac Fonseca y Manuel Perera.